miércoles, 19 de junio de 2013

LA HISTORIA DE MI VIDA....

Hola, tanto tiempo... Les cuento que no entraba a publicar antes porque no me andaba la maquina donde tenia todos los archivos y por eso no podía hacerlo.
Bueno, hoy les voy a contar una historia sobre mi, espero les guste y capaz se sientan identificados...
Empecemos:

Hace muchos años, un 29 de julio de 1998, nació una nena llamada Lourdes. Su familia estaba muy contenta por esto. A esta nena le gustaba andar por los pisos, meterse abajo de los muebles,,jugar con las amigas, comer mucho salamines y lo que mas le gustaba era jugar a las muñecas con su abuelo a quien le decían cholo. Cuando era aun pequeña ella hablaba con su abuelo de que cuando cumpliera 15 le gustaría entrar con el agarrada de la mano a la fiesta y ver a todos sus amigos y familiares .
los años pasaron y no pudo cumplir su sueño, el que tenia de entrar con su abuelo.
A esta nena que ya creció le gusta salir con las amigas, ir a bailar, divertirse y muchas cosas más. le gusta usar la computadora, hablar con sus amigas/os, arreglarse, hablar de lo que le gustaría hacer Cuando sea grande también le gustaría cuidar bebes en una guardería al igual que su mama.
A ella le gustaba mucho un chico, pero el chico no le daba bolilla y ella se ponía mal , mientras pensaba a en el chico también pensaba en como iba a ser su fiesta faltando 1 mes y 2 días... los tenia contados...
Continuara...

jueves, 30 de mayo de 2013

Las chicas electronicas

En este libro te podes encontrar con barios tipos y géneros por ejemplo yo elegí las chicas electrónicas les dejo una síntesis y abajo por si lo quieren leer a mi me gusto mucho



Síntesis: Son dos hermanas que salían a bailar  a eso de las 2 o 3 de la mañana con sus amigos, se juntaban  en kioscos,bares y esquinas.Una de ellas usaba brillantina en la cara y en el escote y zapatillas con plataforma, un tatuaje en el hombro y usaba tops de una manga para que se le vea .La otra tenia un aro en ombligo que se le infectaba.
Los rolingas sacaban a recluir sus zapatillas blancas.el flequillo y un pañuelo al cuello, no les gustaba que les dijeran así, ellos se llamaban stones.
La madre de las chicas se asustaba por unas lastimaduras que tenían sus hijas y al ver el parentesco e los amigos

Cuento:

Las Chicas Electrónicas - Ana María Shua

-¿Te acordás, hermana? Nos íbamos a bailar a las dos, tres de la mañana, de golpe los jóvenes copábamos la calle, como si todos al mismo tiempo saliéramos de nuestras madrigueras. Nos juntábamos en los kioscos, en los bares, en las esquinas…
-Me acuerdo. Usabas brillantina en la cara y en el escote. Y esas zapatillas de plataforma que te gustaban tanto pero te hacían torcer el tobillo.

-Estaba muy orgullosa de mi aro: me había costado varias infecciones y todavía lo tenía allí. Vos te ponías gel en el pelo. Y usabas tops con una sola manga para lucir el tatuaje en el hombro. ¿Lo tenés todavía?
-Una vez me hice un esguince y de algún modo me las arreglé para seguir bailando. Lo que es ser joven. Al día siguiente me tuvieron que enyesar. Y vos tenías el aro en el ombligo.
-No, me lo saqué con láser hace unos años. Los rollingas sacaban a relucir sus zapatillas blancas, el flequillo y los pañuelitos al cuello.
-No les gustaba que les dijeran rollingas. Ellos a sí mismos se llamaban stones.
-Tenías ese amigo alternativo, ¿te acordás? que se pasaba la mitad de la vida levantándose los pantalones. Y usaba la cadena colgando atrás para sostener la billetera. Pero sin billetera, porque ya se la habían robado una vez con cadena y todo.
-¡Cómo se asustó mamá cuando me hice esa lastimadura con las uñas!
-Ah, claro, con la onda de la escarificación. Nuestros padres no apreciaban mucho las cicatrices.
-Enseguida corrieron a consultar a su terapeuta, como hacían siempre. POr suerte la mina estaba en el mundo real y les dijo que se quedaran tranquis, que era nomás una moda.
-Vos usabas el pelo violeta, te lo habías decolorado para que te tomara bien y estaba todo arruinado, como paja. Me acuerdo que la abuela te pagó la peluquería como regalo de cumpleaños y cuando vio la obra terminada se quería cortar las venas con una vainilla.
-Siempre te envidié el mameluco anaranjado brillante. Yo no tenía una ropa tan electrónica. Todos te miraban. Nuestro gran sueño era participar alguan vez en la súper rave internacional, el Love Parade de Berlín.
-Mamá se sorprendía de ver a nuestros amigos varones con los ojos pintados. Y cuando le contábamos que bailaban entre ellos…
-Pretendía que le explicáramos las diferencias entre el house y el trance o entre el drum-and-bass y el jungle. ¡Si lo último que había escuchado ella eran los Beatles!…
En el año 2030, así recordarán mis hijas esas madrugadas electrónicas de Buenos Aires. Y mientras charlan, escucharán música, pero no precisamente tecno: escucharán tango, algún viejo clásico como Adiós Nonino. Que no es música de pibes. Porque para disfrutar del tango hay que haber tenido y haber perdido, hay que ser capitán de la nostalgia, enamorado del recuerdo.